Con la llegada del frío es inevitable que cada persona piense en formas, comidas y bebidas para combatir las bajas temperaturas. Buscamos el perfecto compañero para el frío.
Si nos ceñimos a estas últimas, las bebidas, atraen a la mente las típicas imágenes de lugares fríos en los que sus habitantes consumen destilados en copas o petacas.
En Escocia, uno de los lugares más fríos y húmedos del Reino Unido, disfrutan de un elixir que incluso cuenta con denominación de origen propio, el Scotch Whisky o Whisky Escocés. Esta bebida se elabora principalmente con cebada malteada y otros granos (Whisky Blended), aunque pueden encontrarse whiskys cuya composición puede ser únicamente de cebada. Debido al lugar donde se ubica la destilería, el whisky que produce es clasificado como Highland, Speyside, Lowland, Islay o Islands.
Aunque en sus inicios fue concebido como un producto medicinal, su graduación hace que se haya convertido en una bebida de consumo popular y haya acabado convirtiéndose en el perfecto aliado para las frías y lluviosas noches de invierno.
¿Cómo encontrar el compañero perfecto para el frío?
Aunque un whisky puede disfrutarse de diferentes maneras, por sus propiedades, sabor y efecto térmico al ser consumido, podemos destacar dos formas en las que poder tener una agradable experiencia con su consumo.
El método clásico, con el cual se podrá disfrutar en mayor medida de la pureza de un whisky. El servicio se ofrece de forma individual y la malta se vierte en un vaso a temperatura ambiente, para no alterar sus sabores. De esta manera puede ser el compañero perfecto para ser disfrutado en invierno. Dado que su sabor puede resultar demasiado fuerte para algunas personas, en ocasiones, esta malta es rebajada vertiendo un poco de agua o añadiendo hielo macizo a la copa.
De una forma más vanguardista, podrás disfrutar de la agradable experiencia del whisky en un cocktail, siempre que formes parte del público más atrevido. O buscar nuevas composiciones en cafés o infusiones, para el cual se recomienda el whisky blended.
Aunque estos métodos son los más comunes para el consumo en épocas y lugares fríos, existen muchas formas de disfrutar de un whisky. Podrás disfrutar de variantes con whisky más suaves y agradables al paladar, combinándolo con cualquier tipo de refresco o zumo.
